USOS DE LA CAMELIA
La Camelia además de ser una de las plantas preferidas por los escritores románticos para describir jardines, es una de las 50 plantas más fundamentales en la medicina tradicional china. El aceite de camelia conocido como tsubaki es considerado el “aceite de oliva de Asia”, actualmente, el resto del mundo está conociendo las propiedades de lo que se conoce como el tesoro de Asia. Este arbusto es originario de Japón, China y Corea. De sus semillas se extrae, generalmente por prensado, su preciado aceite.

Las flores de camelia son muy utilizadas como decoración en la ceremonia del té y sus propiedades han sido el secreto de la belleza de la piel y cabello de las mujeres orientales desde hace muchísimos siglos. Generalmente se utiliza en el campo de la cosmética en brillos para labios, humectantes corporales y faciales, jabones etc.
Tiene numerosos beneficios para la dieta, la piel y el cabello. Contiene un alto porcentaje de Vitamina E que es un estupendo antioxidante y se considera primordial para la protección celular y la piel saludable y acido oleicos, como el omega 9, pero en general, contiene más ácidos grasos que el aceite de oliva.
El aceite de camelia gracias a su riqueza en proteínas y vitaminas vegetales contribuye a recobrar el equilibrio dérmico. Actúa como restaurador y combate los efectos de las inevitables agresiones externas, responsables del envejecimiento cutáneo.
Con la aplicación diaria mejora considerablemente la calidad de la piel. El aceite de camelia es ligero, se absorbe fácilmente y sirve como humectante de las manchas secas y ásperas. Además puede utilizarse como emoliente de las pieles secas y en casos de acné.